6 may 2013

Moreda, a golpe de riñón

200 cicloturistas recorrieron la localidad alavesa en Mountain Bike
Un grupo de cicloturistas que ayer tomaron parte en la 'IV Travesía BTT Enoaventura', en plena etapa con la localidad de Labraza al fondo. (P.J.P.)

moreda de Álava. Con salida y meta en la localidad alavesa de Moreda de Álava, con un recorrido de 45 kilómetros y un desnivel acumulado de 1.226 metros, la IV edición de la marcha cicloturista Travesía BTT EnoAventura tuvo lugar ayer con la participación de más de 200 ciclistas que completaron con éxito un recorrido que transitó por los municipios de las comarcas de Rioja Alavesa y Tierra Estella (Navarra). Cuatro años después de la experiencia de la primera edición, esta popular carrera se ha consolidado como una de las pruebas de referencia del mountain bike en Rioja Alavesa en el calendario deportivo, que ayer tuvo nuevamente a Moreda de Álava como punto de salida. La etapa discurrió por los municipios de Viana, Labraza y Aras.
Miembros de la organización insistieron ayer en que los objetivos de la marcha pasan por el fomento de la práctica de esta actividad deportiva, así como la promoción del territorio y la singularidad del paisaje del extremo oriental de Rioja Alavesa y el extremo occidental de Tierra Estella (Navarra), "además, claro, de atraer a los aficionados al BTT a practicar el deporte en esta zona tan espectacular", añadió un portavoz.
Entre las novedades de la IV Travesía BTT Enoaventura destacó la organización de tres circuitos, dos de ellos enfocados al público adulto, y un tercer recorrido dirigido por un guía y orientado al público infantil y acompañantes, para quienes se organizaron también diversas actividades lúdicas y deportivas durante todo el día.
La ruta discurrió por los valles que dibujan un accidentado y bello paisaje de terrazas cultivadas entre Labraza y Aras en su descenso desde la sierra hasta las localidades de Moreda y Viana. Un paisaje en que el que comparten terreno cultivos de vid, olivo, almendro y cereal, principales cultivos mediterráneos, que son rodeados por las serpenteantes sendas y caminos por las que discurre la prueba. La buena climatología también contribuyó al éxito de la jornada, cuyos organizadores ya están en marcha para organizar la quinta edición.