30 ene 2014

Aumenta la tensión tras una semana de huelga en la planta de galletas de Viana

  • El comité solicitó la presencia de Inspección de Trabajo al detectarse la entrada de varios empleados de ETT

Una imagen tomada tras la manifestación del sábado ante la fábrica de Viana. S. E.

Este lunes se cumplió una semana del inicio de la huelga indefinida que ha mantenido parada durante ocho días la planta de galletas de la multinacional americana Kraft en Viana sin que hubiera ningún indicio de acercamiento entre los representantes de los trabajadores y la dirección. Muy al contrario, el comité solicitó la presencia de la Inspección de Trabajo al detectarse hacia las 9.30 de la mañana la presencia de varios trabajadores contratados por ETT en el interior de la fábrica.

Desde el pasado lunes las únicas personas que entran en las zonas de producción son los servicios mínimos pactados, un técnico de mantenimiento por turno para asegurarse de que las instalaciones siguen en orden, al margen de los mandos intermedios, que no secundan la huelga. Al contrario, la gran mayoría de la plantilla de producción ha respaldado el llamamiento. La fábrica de Viana da trabajo a unos 250 empleados fijos, una cifra que asciende hasta casi 400 personas si se suma el personal temporal y los efectivos de ETT.

Viana es la única planta de Kraft que produce la galleta Oreo para toda Europa. La representación de los trabajadores indicó que la empresa pretendía a través de la introducción de empleados temporales arrancar el molino de galletas Oreo con el que se suministra a una fábrica de Barcelona que a su vez elabora las tartas Oreo. En un comunicado, Mondelez Internacional (la división de galletas de Kraft) desmintió que se hubiese contratado a ningún empleado para contrarrestar el efecto de la huelga. "Los trabajadores temporales que emplea la compañía ya estaban contratados con anterioridad a la convocatoria de paros", indicaron. "La compañía ha adoptado algunas medidas para garantizar la seguridad e integridad de sus empleados y de sus instalaciones", añadieron además. 

La huelga indefinida de la planta de galletas de Viana, que ya tuvo un precedente en el año 1996, se convocó en protesta por elincumplimiento del convenio al cambiar el turno a 21 trabajadores y como instrumento por parte del comité para presionar para que se negocie el convenio que debe regir a partir de 2014, ya que hasta ahora no ha conseguido sentarse con la empresa a debatir las condiciones.