14 nov 2014

Viana: el Arzobispado olvida a Viana


JESÚS GARCÍA FERNÁNDEZ DE BARRENA

En 1945, y por deseo de la familia, el palacio de los Urra Lezaun, en Viana, pasó a manos de la parroquia de esta ciudad (conociéndose desde entonces como Casa de la Acción Católica). Así, según el documento de donación encontrado en el archivo parroquial, era deseo de esta familia que este lugar fuera destinado para fines religiosos, culturales y pastorales.
“En ningún caso, ni por razón alguna pueden vender la casa, a nadie facultamos para esto”: (sic).
A finales de 2006 se firma por parte del Arzobispado, el párroco y el constructor un documento de cesión a cambio de obra para reconstruir el edificio (que data del siglo XVII), cediendo parte del mismo al constructor. Este acuerdo concreta que la propiedad seguía siendo de la parroquia.
Posteriormente, en enero de 2008, se modifica el acuerdo anterior en lo relativo a la titularidad del inmueble. En esta ocasión el cambio se ratifica por parte del Arzobispado y el constructor, en ausencia del propietario, es decir, el párroco. Es desde entonces que el constructor se hace con la propiedad.
La constructora, una vez que las obras en el palacio de Urra habían sido iniciadas, entró en quiebra y en concurso de acreedores. Tras una subasta, el Banco de Santander se hizo con la propiedad, al tiempo que el Arzobispado no mostró el interés debido en tratar de recuperar el palacio.
En la actualidad la parroquia de Viana no dispone del local adecuado para realizar la labor pastoral y cultural (catequesis, Cáritas, cofradías, albergue de peregrinos etcétera), teniendo que destinar bajeras para vehículos y locales de escasas dimensiones y con múltiples barreras arquitectónicas para todos estos cometidos.
La sensación que tiene la parroquia de Viana, y la ciudad en general, es de un total desamparo del Arzobispado y una gestión de total desidia que ha supuesto la pérdida de un legado que por deseo de los Urra nos corresponde.